¡Qué fácil es perder peso!

Ya es septiembre y muchos de nosotros hemos disfrutado nuestras merecidas vacaciones. La primera consecuencia es que la ropa nos va más apretada. La báscula no engaña: hemos cogido algunos kilos de más. Pero que buenas que estaban las tapitas, las cervecitas, los heladitos…

Ahora toca ponerse manos a la obra y volver a perderlos. Es muy fácil. Lo primero que pensamos es en empezar una dieta hipocalórica, o sea, seguir una dieta con menos calorías de lo habitual. En verdad no es necesario. Sólo hace falta que dejes de comer helados, bollería, suprimas el alcohol y potencies las verduras.

Pero es imprescindible hacer ejercicio físico. Si no haces ejercicio físico tienes muchas probabilidades de fracasar. Y es precisamente el 25% de éxito de que una dieta hipocalórica surta efecto es hacer ejercicio físico.

Si no haces ejercicio físico es muy probable que pierdas masa muscular en vez de perder el exceso de grasa. Por eso, con el ejercicio fortalecemos los músculos, y nuestro organismo irá a buscar las calorías a la grasa y dejará nuestros músculos tranquilos.

Además, con el ejercicio físico se acelera el metabolismo y por tanto, la pérdida de peso es más rápida.

Ahora llega el momento de decidir qué tipo de ejercicio físico hacemos. ¿Nos apuntamos a un gimnasio? ¿Corremos una maratón?. Nada de eso. Es mucho más importante la constancia que la intensidad. Nunca lo olvides. El exceso de ejercicio también es perjudicial, porque puede provocarte lesiones o debilitar tus defensas.

Así que lo que realmente debes hacer es moverte y desentumecer las articulaciones. Ahora te propongo una serie de hábitos que deberías seguir, y si los acompañas con una dieta hipocalórica, te aseguro que perderás 3-4 kilos en muy poco tiempo.

• Tienes que asegurarte el caminar una hora a paso rápido. Puedes hacerlos en 2 sesiones de media hora cada una. Por ejemplo, al ir a recoger a los niños al cole, en tu rato del desayuno, al ir a trabajar, levantarte una hora antes, después de comer, etc.
• Sube las escaleras cada día en vez de coger el ascensor. Si subes 4 plantas el primer días, tendrás la sensación que se te sale el corazón y tendrás las pulsaciones a 1000. Te aseguro que al 6º día llegarás más fácilmente. Tus rodillas también te lo agradecerán porque se irán fortaleciendo. Si vives en un 8º piso, sube hasta el 4º por las escaleras y resto en ascensor. Y poco a poco irás alargando las plantas subidas por las escaleras. Y si vives en un primero, sube hasta el 4º y luego vuelve a bajarlas.
• Si te toca hacer las tareas del hogar, toma consciencia de los movimientos que haces para ejecutarlos bien y convertirlos en un ejercicio de entrenamiento.
• Si tienes perro, alarga el tiempo de los paseos diarios que haces con él. El beneficio será para los dos ya que tu mascota estará super feliz que le dediques más tiempo a lo que más le gusta. Como ayuda y motivación existe una  APP gratuita para registrar los recorridos y tiempos que empleáis.
• El yoga y el pilates son prácticas que van muy bien para las personas que no están acostumbradas a hacer ejercicio porque se ajustan a la capacidad de cada uno y aumenta progresivamente la elasticidad, agilidad y concentración. Si tienes tiempo puedes hacerlo en tu propia casa viendo un video en youtube, o acudir a un centro especializado.

Estos sólo son algunos ejemplos. Cada uno puede pensar cómo ajustar el ejercicio físico en su vida diaria sin comprometer excesivamente su tiempo.

Los beneficios los notarás enseguida, ya que además de perder peso fácilmente, notarás una disminución de tu estrés diario y una mejora de tu autoestima.

¡Ánimo, que tu puedes!