El desayuno que te hoy propongo es dulce.
Bizcochitos de caqui y canela
Son unos bizcochitos muy suaves y esponjosos que cuando te comas uno te sabrá a poco.
No llevan leche, así que las personas intolerantes a la lactosa pueden comerlos. Para sustituir la parte líquida de la receta, he utilizado caquis, también llamados «palo santo», que cuando están maduros y aptos para comer son muy blanditos y podría decirse que difíciles de comer de «forma educada». No utilices ni los sharon ni los persimons que tienen la pulpa más consistente y no servirían para esta receta, o por lo menos, no garantizo que te salga bien.
El caqui es una fruta muy antioxidante con grandes dosis de betacaroteno, que en nuestro organismo se convierte en vitamina A, y que junto con las vitaminas C y E ayudan a nuestro sistema inmunitario a funcionar correctamente, prevenir problemas oculares, mantener nuestra piel sana y evitar la oxidación de las células.
También contiene pequeñas cantidades de vitaminas B1, B2 y B3 que favorecen el buen estado del sistema nervioso. Además, nos aporta una buena cantidad de potasio que ayuda a controlar los impulsos nerviosos y la actividad muscular, siendo un alimento idóneo para los deportistas. Así mismo, como regulador de los fluidos corporales, el caqui es beneficioso para los enfermos renales y las personas hipertensas.
Por último, esta fruta también es un buen laxante gracias a que contiene pectina (fibra soluble), una fibra que evita el estreñimiento.
Los diabéticos deben tener en cuenta que el caqui tiene mucho azúcar por lo que deberían moderar su consumo.
Estos bizcochitos también te aportarán grasas saludables, que protegen el corazón y minerales como el hierro, calcio, magnesio y fósforo gracias a la harina de almendras.
La mantequilla que he usado es una de coco vegana que no está hidrogenada. En la foto puedes ver la marca y el precio.
Aunque si quieres hacerla tu misma es muy fácil, «Lolita la pastelera» te lo muestra en este vídeo.
El endulzante que he escogido es el azúcar de coco, es una de mis opciones preferidas como endulzante, ya que tiene un IG (índice glucémico )bajo, que junto con la fibra que contiene, regula la glucosa en sangre mejorando la respuesta de la insulina (hormona que segrega el páncreas).
En vez de huevos he utilizado almidón de tapioca y agua, mezclando las cantidades propuestas en la receta es la equivalencia a utilizar dos huevos.
Debes tener cuidado con la cantidad de canela que añades, porque tiene un sabor muy predominante. Si no te gusta la canela, sustitúyela por vainilla, o simplemente no le pongas.
A mi me han salido doce bizcochitos. También puedes poner toda la masa en un molde y hacer un bizcocho más grande.
Ingredientes:
- 125 gr de pulpa de caqui.
- 80 gr de harina integral de trigo.
- 50 gr de almendra molida.
- 50 gr de azúcar de coco.
- 75 gr de mantequilla de coco.
- 2 c.s. de almidón de tapioca.
- 6 c.s. de agua mineral o filtrada.
- 2 c.c. de levadura de repostería.
- Un poco menos de 1/2 c.c. de canela.
- Las semillas de dos vainas de cardamomo molidas.
Elaboración:
Precalienta el horno a 170 ºC.
Lo primero que tienes que hacer es preparar los ingredientes.
Pela dos caquis y pásalo por la batidora para homogeneizar su pulpa y no encontrar fibras que entorpezca la elaboración de la receta.
Tamiza las harinas.
Deshaz la mantequilla con un poco de calor suave.
Mezcla el almidón con el agua.
Mezcla en un bol los ingredientes secos: la harina de trigo, la harina de almendra, el azúcar de coco, la levadura, la canela y el cardamomo.
Mezcla en otro bol los ingredientes húmedos: la pulpa de caqui, la mezcla de almidón con el agua y la mantequilla derretida.
Incorpora la mezcla líquida a la mezcla de los ingredientes secos y remueve hasta conseguir una masa homogénea.
Rellena tus moldes. Si no son de silicona deberás engrasarlos.
Hornea a durante 25 minutos.
Deja enfriar y sírvelos solos o acompañados de mermelada, compota, miel o como más te gusten.
Si te ha gustado la receta comparte en tus redes sociales.
Puedes ver el video de la receta a continuación: