Ketchup casero

¿Tienes un bote de ketchup en la nevera? Seguro que sí. El ketchup es ideal para acompañar ciertos platos como unas patatas o una hamburguesa, aportándoles un toque de gracia.

Aquí te voy a mostrar cómo hacer esta famosa salsa en casa de una forma natural, evitando aditivos que son tóxicos y el exceso de azúcar refinada que suele estar presente en el ketchup. En este caso, he utilizado el azúcar de coco, que es una opción mucho más saludable.

El gran beneficio que te aporta el ketchup es a través del licopeno, que es es un antioxidante que tiene propiedades antienvejecimiento, y ayuda a prevenir el cáncer, sobre todo, el de próstata.

El licopeno es un pigmento que aumenta al ir madurando el tomate. De todas las variedades de tomates, el tomate «pera» es el tomate que más licopeno contiene. Debes tener en cuenta que hay que cocinar el tomate para que nuestro organismo pueda asimilar el licopeno. El aceite y las altas temperaturas facilitan su absorción. 

El ketchup es una salsa que no suele llevar grasas, pero yo le añado una cucharada de aceite de oliva virgen extra para que ayude a asimilar bien el licopeno y poder pochar las verduras más fácilmente. 

Los ingredientes de esta receta los puedes ajustar a tu gusto. Te aseguro que el resultado te sorprenderá tanto como a mí. A partir de ahora el ketchup que comeremos en mi casa será según esta receta.

Ingredientes:

• 1 kg de tomates pera.
•  1 cebolla mediana.
• 1 ajo.
• 1 c.s. de aceite de oliva virgen extra.
• 1/2 c.c. de mostaza en polvo.
• 1 pimienta de cayena pequeña.
• 1 c.s. de pimentón dulce.
• 2 clavos de olor machacados en el mortero.
• 50 gr. de azúcar de coco.
• 50 ml. de vinagre.
• Sal y pimienta.

Elaboración:

Lava los tomates, pélalos y los despepitas. Ponlos en un colador para quitar el exceso de agua.

Pocha la cebolla y el ajo en una cacerola con el aceite de oliva. Remueve a menudo para que no se pegue, ya que tienen poco aceite.

Cuando tome un poco de color la cebolla y el ajo, añade el tomate triturado.

A continuación agrega el resto de ingredientes y deja cocer una media hora removiendo a menudo para que no se pegue y que se evapore el agua que pueda quedar.

Una vez acabado, pasa la salsa por la batidora y seguidamente por un colador para que quede una salsa fina.

Deja enfriar y degusta con tus platos preferidos.

Este ketchup lo utilicé para acompañar unas patatas, unos espárragos verdes y unas tiras de tempeh que preparé al horno.

Espero que te guste tanto como a mí. Si es así, comparte la receta en tus redes sociales.