Los tomates están presentes en el mercado todo el año. Si son meses de frío, los tomates proceden de invernadero y ni tienen gusto ni tienen las mismas propiedades como cuando se cultivan en la huerta. Por eso es mejor comer los tomates de temporada, o sea, en verano, que es cuando son más sabrosos y tienen más aroma al haber madurado en la rama.
Si vives en una zona donde los tomates de huerta todavía están en el mercado, haz esta receta que es muy fácil, viste mucho la mesa y es ideal para alguna ocasión especial.
En una receta anterior, «Crema de tomate con tofu», te contaba todos los beneficios y propiedades que el tomate nos aporta. Recuerda que si tomamos el tomate cocinado y con algún tipo de grasa, es más fácil absorber el licopeno que contiene. El licopeno es un antioxidante que ayuda a prevenir las enfermedades cardiovasculares y es anticancerígeno.
Estos tomates se complementan con el cuscús, que son los hidratos de carbono de esta receta que nos dan energía y saciedad. Además, si lo acompañamos de alguna ensalada, o como en este caso, los canónigos, estamos aportando fibra y enzimas, que ayudan al buen estado de nuestro sistema digestivo.
Te animo a que hagas esta receta y me cuentes en los comentarios tu parecer o quizás si le añadirías o quitarías algún ingrediente.
Ingredientes:
- 4 tomates grandes
- 1 cebolla
- 1 ajo
- 1 calabacín
- 1 pimiento rojo
- 1 vaso de cuscús
- 1 vaso de caldo de verduras
- Aceite de oliva virgen extra
- Albahaca, tomillo y orégano
- Sal y pimienta
- Almendra molida
Elaboración:
Vacía los tomates y reserva la pulpa y los tomates vacíos.
Echa aceite de oliva virgen extra en una sartén grande o cazuela y pocha la cebolla cortada a cuadraditos y el ajo picado.
Añade el pimiento picado y sofríe unos minutos para después añadir la pulpa del tomate.
Agrega la sal, la pimienta y las hierbas a tu gusto.
Cuando todo esté bien pochadito, añade el caldo de verduras.
En el momento que empiece a hervir, apaga el fuego y añade el cuscús. Tápalo durante tres o cuatro minutos.
Entonces, destapa y añade un chorrito de aceite de oliva virgen extra, remueve todo con un tenedor para separar los granos del cuscús.
Rellena los tomates con esta mezcla y espolvorea por encima un poco de almendra molida.
Pinta los tomates con aceite de oliva.
Hornea los tomates a 200ºC durante diez minutos.
Sirve sobre una cama de canónigos para aportar la parte vegetal verde y cruda a la receta.
