Día Mundial del Medio Ambiente

Desde 1974, cada 5 de junio se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente.

El Medio Ambiente es todo lo que nos rodea. Es el entorno donde vivimos y todo lo que influye para que esto sea posible.

Es la naturaleza, los paisajes con todos los seres vivos, los humanos, los animales y las plantas, el clima, el agua y el aire.

Es todo lo creado por el hombre para el desarrollo de la civilización.

Es la cultura de cada país que influye en la manera de vivir de sus habitantes. Son los valores, las tradiciones y el sistema socioeconómico.

El Medio Ambiente es muy importante y todos somos responsables de su salud.

El cambio climático está asociado al Medio Ambiente y es una realidad que todos los habitantes de la Tierra estamos en peligro porque estamos cambiando el equilibrio climático de nuestro planeta. Y lo estamos provocando nosotros de manera muy rápida que puede llevarnos al colapso total y la desaparición de la vida.

Cada día hacemos muchas cosas mal que ayudan a incrementar el efecto invernadero, lo que provoca el aumento de la temperatura de la Tierra. Esto nos puede costar muy caro.

Y no me refiero a una multa, como las que pagan las grandes empresas cada vez que incumplen los pactos internacionales de no contaminar y que pagan, ya que les sale más barato pagar las multas que dejar de contaminar y perder los beneficios que generan y llenan sus bolsillos.

Me refiero al aumento de la temperatura que desertifican paisajes que antes estaban llenos de vegetación y que produce el deshielo de los polos y entonces aumenta el nivel del mar progresivo, lo que provoca la destrucción del hábitat de la fauna y a la larga, la inundación de las ciudades costeras. 

También me refiero a la contaminación del aire que ya se hace irrespirable en muchas ciudades y que es el origen de muchas enfermedades que estamos padeciendo.

Me refiero a la contaminación del agua, que incide gravemente en la salud de los océanos y ríos, con graves consecuencias para los animales y la vegetación de estos ecosistemas.

La cría intensiva de ganado hace mucho daño al Medio Ambiente. Los mismos animales emiten gran cantidad de gases al aire que aumentan más rápidamente el efecto invernadero. Los purines que excretan los animales contaminan el suelo, con el riesgo que filtrarse al subsuelo y llegar al agua de los ríos y acuíferos.

Para alimentar el ganado se desforestan grandes superficies para cultivar el grano con el que fabricar sus piensos. A su vez, estos cultivos de cereales, que además suelen ser transgénicos, son fumigados con pesticidas y fungicidas que contaminan el aire, el agua y el cereal que servirá de alimento para el ganado.

Es un hecho que las abejas están desapareciendo a causa de los pesticidas. Sin abejas no hay polinización, y sin polinización, no hay flores ni frutos.

Para que la cría de ganado sea más lucrativa, los animales son hormonados y tratados con antibióticos.

Al final del proceso, los pesticidas, fármacos y hormonas quedan en las bandejas de carne y pescado que son consumidos por las personas.

Te preguntarás qué puedes hacer tú para contribuir a reducir el aumento de temperatura de nuestro planeta.

A continuación te recuerdo algunas maneras sencillas con las que podrás mejorar el planeta durante el día a día:

• Poner en práctica las «Tres R», reutilizar, reducir y reciclar.
• Consume productos locales. Así beneficiarás a tu barrio y evitarás la contaminación producida por los transportes que traen los productos de otros países.
• Utilizar bolsas de tela o reutilizables cuando vayas al mercado. Así evitarás el uso del plástico.
• Comprar los productos a granel. Así evitas el uso del poliestireno y el plástico de los envases.
• Optar por la alimentación ecológica. Así ayudarás a reducir el uso de pesticidas y hormonas.
• Leer las etiquetas para informarte de lo que vas a comprar. Así evitarás consumir productos que contengan ingredientes transgénicos y aditivos.
• Evitar el uso del aceite de palma. Así ayudarás a conservar el hábitat del orangután que es donde se cultiva la materia prima para elaborar el aceite y no gastigarás tu salud con este producto tan dañino.
• Si no eres vegana, reducir el consumo de carnes y pescados. Así ayudarás a reducir los procesos de fabricación que tanto contaminan y la cría intensiva de estos pobres animales.
• Reducir el consumo de los alimentos procesados y optar por la comida casera. Así tu salud te lo agradecerá y el medio ambiente también.
• Caminar siempre que puedas, en vez de utilizar el coche o moto. Y si es necesario, optar por el transporte público.

Cuando tengas un ratito, te recomiendo que veas este video relacionado con el cambio climático.

Y sobre todo, REFLEXIONA qué planeta quieres dejar para las próximas generaciones. 

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